8 de Julio 2008

LOGIAS (XIII)

Ocurre a veces que no se sabe si antes se ha vivido una situación igual, acaso similar a la que en la realidad presente ha lugar. Cuando a Vengando le quitaron la venda de los ojos no le cegaron menos. En un paraje no del todo desconocido, monstruos de granito se erguían delante, y rodeados por los pinares pudo intuir tras él, por quienes entre sí hablaban, a varios hombres y mujeres de la logia de un grado superior al suyo. Una voz femenina comenzó:

-Ha pasado mucho tiempo, señor Vengando. Estábamos muy interesados en que viniera, y pese a las condiciones que hemos tenido que imponerle, le agradecemos haya accedido. De hecho, sabemos que es difícil que pueda llegar más lejos.

-Como los sueños -era ésta la voz de un hombre-, no va a saber si le engañamos o no. Como los sueños, como el que le ha despertado esta misma mañana, verbigracia, en el que varias imágenes de Medusa le asediaban, la oferta que le haremos puede ser fácil de olvidar.

Era imposible que supieran hasta eso; de alguna manera, aquella decapitada imagen de sanguíneos hilos colgantes y rostro aterrorizado se la habrían inducido ellos...

-Y como los sueños -hablaba de nuevo la mujer, solemne-, lo que le proponemos puede ser una levedad en el infinito, algo que se pierda, un pasado difuso para un futuro incierto que podríamos cambiar. A usted le gustaría crecer con nosotros; nosotros también así lo desearíamos. Por desgracia, puede que no sea usted el elegido, que seamos nosotros quienes nos equivoquemos...

Que su vida cambiara por completo quedaba en sus manos. No había mucha más esperanza... Tras unos minutos de silencio, el convidado de piedra optó por darse la vuelta. Se habían ido todos. A lo lejos oyó unas voces, y en unos minutos, el ruido de los motores pareció perderse hacia el abismo, como a su abismo caía.

Atentado por VENGANDO a las 8 de Julio 2008 a las 04:30 PM
Apoyos, condenas o venganzas
Responder o corresponder









¿Recordar informacion personal?