AL MUY BARROCO LE EXIGIERON DE REPENTE HACER TODO LO CONTRARIO DE LO QUE LE GUSTABA. ÉL BUSCABA OPINIÓN, EVOCACIÓN, INTENSIDAD, AMBIGÜEDAD, LIRISMO, FUERZA Y, POR EL CONTRARIO, PARA SU NUEVA ETAPA SE LE PEDÍA OBJETIVIDAD, CONCISIÓN, AMABILIDAD Y TRANSPARENCIA.
APENAS ERA PERMISIBLE, INCLUSO, EMPLEAR ADJETIVOS O ADVERBIOS, Y LA NEGACIÓN TAMPOCO BENEFICIABA A NINGUNO DE SUS NUEVOS TEXTOS. TODO DEBÍA QUEDAR CLARO, PLENO, SIN FLORITURAS ESTÉTICAS.
Y HABRÍA QUE TRABAJAR MUCHO, PERO SI HUBIERA DE SER MÁS PROSAICO TENDRÍA QUE MUTILARSE LAS MANOS Y LA LENGUA, PESE A LO CUAL, Y AUN SIN LLEGAR A ELLO, YA SE PROMETÍA INMINENTE UN DERRAMAMIENTO DE SANGRE.
En un curso tubimos que hacer una prueva que trataba de enfrentarte con una persona super irritante sin decirle nada negativo para llevarlo del enfado al huerto, lo llamaban asertividad...................
Atentado por cedrik a las 7 de Noviembre 2005 a las 06:43 PM