AÚN SE PREGUNTABAN CÓMO LE PODÍA GUSTAR A UNO LA ÓPERA BARROCA.
COMO RESULTABA EVIDENTE, POCOS CONOCÍAN A HAENDEL, A GLUCK, A LULLY... POCOS CONOCÍAN, SIQUIERA, A PERGOLESI.
ESCUCHANDO TAL MÚSICA, UNO SE PODÍA SENTIR COMO EL REY SOL, IGUAL DE FELIZ Y SUPERFICIAL, IGUAL DE HOMENAJEADO, POR UN MOMENTO, SIN PROBLEMAS TERRENALES, LUZ DORADA DEJANDO SINUOSAS SOMBRAS, ESPLENDORES, RESONANCIA EN ARMÓNICOS COLORES, TEATRO DEL MUNDO CONCENTRADO ENTRE COLUMNAS Y BASTIDORES, ENTRE EFÍMEROS DECORADOS PREPARADOS, PARA LA OCASIÓN, AL MÍNIMO DETALLE.
REFLEJABA LA IMAGINACIÓN A TODOS ESPERANDO, ENTRE LA LOCURA Y EL ASPAVIENTO, Y EL INSTRUMENTAL DE CUERDA, ARCOS DE VIOLÍN Y VIOLA LANZADOS DEL CIELO AL INFIERNO, DEL INFIERNO A LA ORQUESTA, EL ÉXTASIS DE LOS TRÉMULOS GORGORITOS QUE DARÍA LA CANTANTE, LOS CASTRATI APARTE, SIN POR ELLO DEJAR DE QUERER EL MÁXIMO VIRTUOSISMO.
PARA CADA CUAL PODÍA SER UN TIPO DE ORGASMO, UNA APOTEOSIS DEL ÚLTIMO GRITO, PESE A QUE EL AFORTUNADO DE TURNO PUDIERA TAMBIÉN APROVECHARSE, DESPUÉS, LUJURIOSO Y MÁS SÁTIRO QUE MELÓMANO, DE LOS ENCANTOS CARNALES DE LA PRIMADONNA...
PERO DESPERTEMOS: YA NO ESTAMOS ENTRE LOS SIGLOS XVII Y XVIII, ENTRE PELUCAS Y CASACONES; SE ACABÓ EL ANTIGUO RÉGIMEN, PESE A LO CUAL, NO OBSTANTE, SI BIEN TOCADAS LAS NOTAS SON AL OÍDO TEMPORALES, LAS PARTITURAS, HASTA SU PÉRDIDA O DESTRUCCIÓN, ATEMPORALES QUEDAN.
Atentado por VENGANDO a las 19 de Febrero 2005 a las 06:19 PMSe acabó, sí, pero cuando Savall resucita a Lully volvemos a sentirnos Luis XIV...
Atentado por Jarry a las 24 de Febrero 2005 a las 02:41 AM